VISITA CONYUGAL (Video)

¿Cómo va esa dieta? - Ya ves... "Chequeando"...

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¿Quién de nosotros no ha visto la clásica película de prisiones donde la esposa de algún preso acude presta a visitarlo y ambos son llevados a una sala ocupada por un triste catrecillo donde la pareja debe acomodar, al apuro, sus necesidades de alcoba? Suele ser una salita adyacente al siempre intrigante cubículo de visita: ese donde el reo fílmico siempre extiende su mano hacia el vidrio insonorizado mientras sostiene un auricular de los de adarga antigua, rocín flaco y galgo corredor, que parece sacado de un largometraje de Peter Sellers.

Desconozco si el encuentro del pasado Viernes 21 de mayo en el Penal García Moreno de Quito tuvo lugar en alguno de esos dos imprescindibles escenarios de cualquier prisión que se precie de serlo, pero echando a volar la imaginación uno podría adivinar el plano, desde las espaldas del reo, cabeza entre las manos en desesperado gesto, mientras asoman por la puerta del cubículo opuesto, los inconfundibles bordados de la blusa del visitante, ceñida en la cintura, mientras se sienta y extiende la palma de su mano, como no, izquierda, hacia el cristal.

Raúl, soy yo, Rafiquito…

Confuso, casi incrédulo, Raúl alza la mirada y toma el auricular. Una lágrima furtiva recorre sus todavía rechonchos cachetes hasta morir enmarañada en las vellosidades labiales de su peinado bigote, mientras, a modo de espejo, la palma de su mano derecha, apenas separada por el grosor del maldito vidrio, casi percibe el calor de su querido visitante.

Rafico… (murmulla con su voz atiplada de sopranoamanerada) Has venido.

Claro, Raúl, te dije que no te iba a dejar solo…

Cuando me comentaron que el Presidente de la República había acudido a visitar al “Dueño del Circo” no lo podía creer. Con una agenda tan estrecha, desaprovechando la oportunidad de disfrutar unos instantes de regocijo familiar con sus hijos, el mandamucho, cual buen samaritano, acude al penal a visitar a su amigo caído en desgracia, para ofrecerle el confort de su irrestricta amistad, la ternura de su abrigado abrazo, la calidez de su perdonadora sonrisa…

Porque eso es lo que fue, nada más.

Qué vileza la de los que pretendan ver en este acto altruista y generoso, algo más allá del amor fraterno entre dos hombres adultos.

Cuanta maldad en el pensamiento de los que osaran insinuar perversas motivaciones detrás del encuentro entre dos compañeritos que se reúnen a recordar tiempos pasados: aquellas épocas felices donde nada menos que Abdalá Bucaram les impartía clases de gimnasia kinesiológica inculcando valores imborrables en sus despiertas mentes de fecunda juventud PRE-revolucionaria.

Una oportunidad para recordar esos inolvidables viajes, PRE-jet Embraer Presidencial, sentados, codo con codo, en los aviones de TAME.

Qué nadie vea en esta visita la consecuencia de un posible preacuerdo malogrado por la presión descarada y malintencionada de la escandalizada opinión pública. Qué poca nobleza los que hayan querido formarse la historia truculenta de un Ministro huido al cual prometen libertad post electoral a cambio de una entrega pública a pico cerrado, quien, despechado ante el intento fallido de excarcelación, amenaza con derrumbarse y aflojar la lengua.

Qué cinismo aquel de los que imaginen veladas amenazas sólo controlables con una muestra de apoyo incondicional, de amor verdadero, de ese quererse de querer de verdad que con orgullo y altivez proclamaba en aquel imborrable (gracias a Youtube) video del Dueño del Circo que ponía y quitaba gobernadores, aquel que cuando ordenaba algo, hasta el Presidente obedecía…




Porque, como dice el presidente, Raúl Carrión es una víctima más, uno más de los inocentes encarcelados sin sentencia. Todos saben que, tal y como declara el mandamucho, el ex ministro merece medidas precautelares mucho más livianitas y digeribles, como el arresto domiciliario reservado a mayores de 60 y mujeres embarazadas.

¿Acaso hay alguien que ponga en duda que Carrión, de 49 años de Edad, es, en realidad, una sexagenaria en avanzado estado de gestación?

Poco importa que estuviera fugado en paradero desconocido con boleta de busca y captura hasta que “le vino en gana” presentarse ante la justicia, ese pecadillo no debe ser tenido en cuenta; ni que su asesor directo mantuviera registro, y cheques no masticados, del 15% revolucionario (no conformes con el diezmo , se pasaron al quinciezmo) recibido por cada contrato de obra asignado a dedo (el deporte, al parecer, también estaba declarado en emergencia: y así debe ser viendo las escasísimas oportunidades que la Tri tiene de repetir la hazaña de acudir a un mundial).

Correa habla de INJUSTICIA y CORRUPCIÓN en contra de Carrión (de Rypley) y, como experto jurista que es, dice que “Cláramente” le corresponde la medida cautelar del Arresto Domiciliario. A Margarito lo tuvo preso 60 días por arrojarle un papel arrugado, a un tipo le hizo pasar el día del padre en prisión por hacerle un dedo a la comitiva Presidencial, a la prima de Alberto Acosta la mandó apresar por decirle que se pusiera a trabajar… y a un sospechoso de haber estafado al Ecuador con millones de dólares que se autoproclamó “Dueño del Circo” y que estuvo en paradero desconocido cuando lo iban a apresar, que no le favorezcan con el Arresto Domiciliario es una injusticia.

En la Revolución Ciudadana, la Justicia ya es de todos…, claro que, algunos son más todos que otros.

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